5. La familia
¿Qué debe hacer la familia si uno de sus hijos o hijas posee altas capacidades intelectuales?, ¿debe actuar de diferente manera respecto a sus otros hijos o hijas?, ¿qué demanda un niño o niña con estas capacidades de su familia?...
La familia tiene un papel un fundamental en el desarrollo de las potencialidades del niño con altas capacidades intelectuales y por ello debe ser consciente y conocerlo.
Las expectativas que tenga la familia deben ser realistas y basadas en un conocimiento objetivo de las características de su hijo, de sus gustos, intereses, etc.
También son importantes las características socioculturales del contexto familiar, ya que determinarán el desarrollo de las capacidades que el niño posee. Los recursos con los que cuenta la familia, pautas educativas, hábitos sociales, culturales, son aspectos que influyen en el desarollo de estos niños.
Algunas de las consideraciones que la familia tiene que tener en cuenta son:
Ejercer su papel educador y socializador: las altas capacidades no deben coartar el papel educador y socializador de sus padres, por lo que la autoridad que ejerzan no debe verse afectada por que su hijo posea unas capacidades superiores, además se han de establecer unas normas y límites adecuados a su edad.
Favorecer una educación integral: hay que potenciar el desarrollo de todas sus facetas y no solo la intelectual, pues en ocasiones pensamos que tiene similar desarrollo en otros ámbitos y descuidamos los aspectos afectivo, emocional, social... generando una serie de problemas. Para evitar esto hay que: aceptarle tal y como es, demostrarle afecto como a otros miembros de la familia, reforzarle y reconocer sus logros con palabras de elogio, reconocimiento social... eliminar cualquier tratamiento especial, favorecer las relaciones con otros niños a través de talleres, excursiones... fomentar su autonomía.
Educar en el respeto hacia los demás: muchas veces estos niños pueden sentirse superiores respecto a sus iguales, lo que suele desembocar en el individualismo y problemas de adaptación social. Para ello la familia debe trabajar algunos aspectos como: responsabilidad, tolerancia y respeto hacia los demás, desarrollo de habilidades sociales, aceptación de otras personas...
Estimular sus capacidades: se ha de estimular el desarrollo de las potencialidades que posee el alumnado con altas capacidades para que llegue a su grado máximo en aspectos que destaca y en aquellos en los que tengan capacidades similares a los niños de su edad. Para ello hay que: mostrar aceptación cuando no destacan en algo, lo cual favorecerá su autoestima y desarrollo. Respetar y apoyar su interés por diversidad de tareas. Propiciarles otras posibilidades de formación extraescolar donde desarrolle sus habilidades como conservatorio de música, escuela de idiomas, actividades deportivas... evitar exigirles demasiado y no caer en la presión excesiva, mostrar paciencia ante sus preguntas, etc.
Planificar el tiempo: la familia debe controlar el tiempo que pasan fuera del colegio y evitar el aburrimiento, esto lo podemos consegir ayudándole en la planificación de sus tareas, dedicándole tiempo, siendo respetuoso con su trabajo, facilitarle materiales en los ámbitos que más les interesan.
Colaborar con el centro educativo: es muy importante la coordinación e intercambio de información entre la familia y el centro educativo. La familia debe: ofrecer al centro toda la información familiar relevante, evitar desacuerdos en los criterios que se aplican en uno y otro contexto, favorecer la integración de su hijo en el grupo de compañeros para evitar el rechazo, etc.
A continuación os dejamos un enlace donde podréis encontrar más información sobre este tema:
¿Crees que tienes un hijo con altas capacidades?